viernes, 29 de marzo de 2013

¿Semana Santa o la Clave de la Inmortalidad?

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Este fin de semana muchos católicos se preparan para la celebración que congrega a miles de fieles en diversas partes del mundo con un solo motivo: celebrar la crusificción y resurreción de Jesus. Creyentes o no, lo cierto es que estas fechas suponen gran expectativa ya sea por las vacaciones o por la oportunidad de estar un poco más cerca de la esencia de la fe Cristiana. Incluso hay quienes recrean el recorrido de este personaje histórico desde su arresto, su visita con los sacerdotes judíos, su juicio con Pilatos, con Herodes y de vuelta a Pilatos para ser juzgado y llevado por las calles de la ciudad hasta ser crucificado. 

No hay que mencionar que la historia también ha sido tomado, moldeada y presentada por medio del Séptimo Arte, y es casi ya una tradición que en estos días nos veamos bombardados por una serie de películas biblicas sobre Moises, el Arca de Noé, el Manto Sagrado, y para culminar la Semana Santa: la Pasión de Cristo (The Passion). Incluso hay una película con este nombre interperetada por el reconocido actor Mel Gibson, que destaca entre las demás y que cautivó una gran cantidad de audiencia en la fecha de su estreno. Muchos fueron profundamente conmovidos por el filme afirmando ser un gran acierto el proponer un trabajo como éste. Y a pesar de que en fechas recientes la Iglesia Católica sostiene una ardua lucha contra la nueva era tecnológica, el avance de las ciencias y una creciente falta de fe entre la población mundial, tanto cristianos como no creyentes se ven afectados por las celebraciones de Semana Santa. Ambos de forma positiva pues unos se van toman algunos días libres del trabajo y la rutina, y otros más rinden homenaje a Jesus, uno de los personajes más polémicos de la historia.

Más ¿Cuál es la Palaba Secreta escondida, en términos filosóficos, tras los festejos del calendario propuestos por la Cristiandad? ¿Celebramos la vida o la muerte? Cuando una persona cercana a nosotros muere, viene la tristeza, la sensación de soledad, el arrepentimiento, el enojo y la confusión. Cuando pasa ese periodo sin embargo intentamos permanecer con los recuerdos más gratos de esa persona -si nos era querida-. En la película de la Pasión (The Passion), se nos recuerda con énfasis la muerte haciendo del sufrimiento del protagonista algo propio. Y es que ¿no es acaso una de las ambiciones humanas trascender la mortalidad y alcanzar la inmortalidad? Aunque lográsemos resucitar, encontrar un vampiro que nos diera semejante don, algún artefacto mágico o encontraramos respuesta en la ciencia para enfrentarnos a la parca de una vez por todas aún nos quedaría el verdadero reto: sobreponernos al olvido. El olvido es la verdadera muerte. De ello estaban muy concientes personajes como Aquiles, Alejandro Magno, Julio César, Napoleón Bonaprte, etc. Así que lo combatieron siendo protagonistas de hazañas que siguen asombrando al mundo muchos siglos después. De ese modo conquistaron a la muerte. E igual que ellos Jesus logró arraigarse de tal modo en nuestra nueva era, que su nacimiento se volvió el punto cero para medir el tiempo, fue emblema de las cruzadas e inició una nueva fe. ¿No es posible entonces aprender más de la vida de estos grandes hombres de la historia, que de su muerte?

La Semana Santa es una fecha en que se recuerda la crucificción y la pasión de Cristo, sí, más también se celebra la vida. Un ciclo que terminó para dar inicio a algo más. Unos precen para que otros podamos vivir, la mejor forma de aprovechar el tiempo que tenemos en este mundo es utilizar cada grano del reloj como si fuera de oro. Estas son fechas para recordar, ateos o Cristianos, que la muerte es inevitable pero la vida es única e irrepetible y que es nuestra para hacer lo que deseemos. 

Con un poco de suerte tal vez también podamos alcanzar la inmortalidad.


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